Trucos sencillos para que no tuerzan los barrales de cortinas.
LO MÁS FRUSTRANTE a la hora de colgar las cortinas, es el hecho de ver que los barrales de madera que usamos, cedan al peso de las telas y comiencen a curvarse en poco tiempo.
Eso puede deberse a cuatro causas:
La madera del barral es "madera liviana".
La madera que se usó para hacer el palo aún no había terminado el proceso de "secarse"; por ende se va torciendo a medida que se va secando.
El peso de las cortinas es demasiado para el grosor del palo que elegimos.
Es muy largo el ancho de la ventana.
¿Cómo identificar estas posibles causas en el momento de comprar el barrote y no sufrirlas luego de colocar las cortinas?
Las primeras 2 causas aquí tratadas, madera liviana y/o sin terminar el proceso de secado, las podemos identificar algunas veces en el costo que tienen los palos a la hora de comprarlos.
Aquél dicho de "lo barato sale caro", en cuestiones de madera, generalmente sucede así. La madera que es mejor, siempre es más "cara". Igualmente, debemos de comprar en lugares que ofrezcan buenas garantías y que sean serios. Siempre puede haber malos comerciantes que ofrezcan algo "caro" cómo sinónimo de "bueno". Pero para eso, tenemos que basarnos en comentarios de anteriores compradores o el tiempo que hace que están trabajando.
Ahora, podemos tener barrales de buena madera e igualmente no soporten el peso de las telas, tal como se muestran en las causas 3 y 4.
¿Qué hacemos pues?
Si vamos a utilizar telas de cortinas pesadas, el grosor del palo tendrá que ser un poco más grueso que los comunes. Los de grosor común son los que llamamos "tipo palo de escoba" y tienen entre 22 a 25 milímetros de diámetro.
Entonces, lo mejor sería usar de 30 o 33 milímetros de grosor. Si fueran palos de pino elliotis, hasta más grueso sería mejor. Pero si fuera de eucalipto grandis seco, con 30 milímetros andaría bien.
Si por una cuestión de costos, sólo pudiéramos conseguir de 24 milímetros, entonces hay una solución económica y que te servirá en las en ventanas más anchas de 2 metros o con telas pesadas o inclusive con telas pesadas y ventanales: colocar un tercer soporte al medio de la ventana. ¡Sencillo y práctico!
El tercer punto de apoyo que se agrega con este soporte al medio de la ventana, será el que no permita que el barral ceda ante el peso de las cortinas.
Este sencillo truco, aún puede servirte cuando sólo consigas palos de madera liviana. Tendrás que poner un tercer soporte al medio, pero en distancias más cortas.
El barral que yo uso en este momento, es de Eucaliptus grandis clear. Ésto permite ofrecerte una duración de más de 5 años manteniéndose derecho si usas este truco.
A la hora de hacerte el presupuesto, iré guiandote, así de esa manera, llevas todo para que te sea mucho más fácil y divertida tu compra.
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¿Nos leémos en próximas entradas?
Pablo Daniel Ferrer
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